"Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, la obra de cada uno será manifiesta; porque el día la declarará; pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará...." 1a. de Corintios 3: 11-15.
El apóstol Pablo nos enseña que nosotros somos constructores, haciendo obras sobre el fundamento que es Jesucristo; pero eso implica que debemos tener mucho cuidado con lo que elegimos para construir, ya que tenemos libertad para escoger los materiales,y eso a su vez es una gran responsabilidad, pues los materiales escogidos para construir serán probados....Hay dos cosas que debemos de tener en cuenta a la hora de construir:
1. La fortaleza del material.
2. La belleza del material.
3. La forma de construir.
En este año que ya casi termina, cómo hemos construido nosotros nuestra vida espiritual delante de Dios? Es una obra de calidad, y de gran belleza arquitectónica? es una obra fuerte capaz de soportar las más rigurosas pruebas? vivimos nuestra vida de la mejor manera posible combinando los recursos con los que dispusimos?
o sólo vimos pasar el tiempo, sin hacer obras para engrandecer la obra de Dios?
Recordemos que vendrá un día en el cual ya no podremos modificar nada....será el día de nuestra evaluación final, y cómo saldrán nuestras obras? se quemarán?
Si Dios bondadosamente nos regala un año más....será mejor que este? construiremos más, y con más calidad? que proyecciones tenemos? que metas espirituales nos hemos puesto desde ya?
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