"Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas....." Efesios 2: 10.
En este versículo, Dios nos enseña que:
1. Nosotros los creyentes somos hechos por Dios. Es decir, Él mismo tomó barro en sus manos y nos diseñó tal cual somos; Él pensó en todos los detalles de nuestro cuerpo y de aquellas cosas que no son físicas, como por ejemplo nuestras habilidades; y nos dotó de cualidades únicas para nosotros, con el fin de individualizarnos; y en un sólo paquete nos dio una personalidad para que la disfrutemos. Él tuvo la paciencia de pensar en lo que nos haría sentir bien y cómodos con nosotros mismos, de aquellas cosas que nos servirían para vivir en este mundo y en el más allá. Y no dudó en dotarnos de cualidades muy buenas, de hecho Dios no es tacaño, como para darnos poco; sino que al contrario Dios es generoso con sus hijos, por eso somos inteligentes, creativos, emotivos, y buscamos la excelencia en todos los aspectos de nuestra vida. Lamentablemente Satanás nuestro enemigo trata mediante campañas sucias de hacernos creer que no servimos para tal o cual cosa, que no somos bellos, o que no tenemos la suficiente inteligencia para tal puesto o carrera, Satanás constantemente apela mediante campañas publicitarias al engaño, provocando en nosotros el deseo ser diferentes; por ejemplo, si tenemos rizos naturales buscamos como alizarnos el cabello; y si es lo contrario que tenemos un cabello liso natural, entonces queremos rizarlo..... no es que sea malo querer cambiar o mejorar algún aspecto de nosotros, sino el hecho de mostrar insatisfacción por la corriente de este mundo, que nos quiere ordenar que es lo bueno en nuestro aspecto mediante la moda o los estereotipos de los medios publicitarios.....si Dios me hizo, no puedo estar mal hecho......
2. Cristo nos hizo para que hagamos buenas obras. El propósito para crearnos y llamarnos a su reino, es para que seamos la prueba fehaciente de que Dios si cambia las vidas de los creyentes; que el evangelio si funciona en aquellos que rinden su vida a Cristo; es lo mismo que hace un vendedor de perfumes, él enseña una muestra de su producto para que la gente conozca de primera mano la calidad del producto. ¿cómo explicarle la conversión a un individuo, si no hubiera pasado primero en nuestra vida? nosotros somos la mejor prueba de que Cristo sí cambia la vida de los que vienen a Él, nosotros estábamos muertos en nuestros delitos y pecados y de ese fango nos sacó Dios. Cuál hijo pródigo después de perderlo todo venimos a Él sólo con la vergüenza de haber fallado y perdido todo, y Él nos recibió con los brazos abiertos haciendo fiesta por tenernos de nuevo en su hogar.....amén.
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