"A ti se te dice: rey Nabudoconosor: el reino ha sido quitado de ti; y de entre los hombres te arrojarán, y con las bestias del campo será tu habitación, y como los bueyes te apacentarán; y siete tiempos pasarán sobre ti, hasta que reconozcas QUE EL ALTÍSIMO TIENE EL DOMINIO EN EL REINO DE LOS HOMBRES, Y LO DA A QUIEN EL QUIERE . ......" Daniel 4: 31-32.
El día domingo 15 de marzo de 2009, será histórico para el pueblo de El Salvador, pues se eligió por primera vez, un presidente cuyo lema durante la campaña fue el cambio y la esperanza. En estas elecciones pasaron muchas cosas; se apeló al miedo, a la difamación, al descrédito etc. pero pudo más el contenido de la esperanza, del cambio, de la unidad y de la libertad...... ahora que ya se definió todo, hay que esperar que se cumpla lo prometido, que se comience a trabajar por hacer realidad aquellas buenas ideas surgidas en el calor de la contienda electoral, por hacer realidad la plataforma de gobierno, por mejorar la vida de todos los Salvadoreños, para que la calidad de vida de todas las personas mejore sustancialmente. De una cosa estamos seguros, este triunfo se debe en primer lugar a que Dios lo ha permitido, el rey Nabudoconosor, fue testigo de cómo Dios tiene dominio sempiterno y su reino por todas las edades, y que Él hace según su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra. El presidente democráticamente electo Mauricio Funes, debe reconocer esto, y gobernar sabiendo que hay un Dios en el cielo que está pendiente de todo, y que es un Dios que aprueba el amor, la paz, la armonía, la bondad y la misericordia, esto es lo que debe de unir al pueblo Salvadoreño pasadas ya las elecciones; tomemos como ejemplo las piedras: son diferentes, irregulares; pero se unen con mezcla de cemento para hacer grandes y fuertes edificaciones. La mejor mezcla para esta sociedad es la solidaridad y la armonía entre hermanos......
Pedimos a Dios muchas bendiciones y sabiduría para el presidente electo, el vicepresidente y su gabinete de Gobierno, y mucha humildad y honradez para que los Salvadoreños vivamos en paz y tranquilidad.
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