"Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: El que
tiene los siete espíritus de Dios, y las siete estrellas, dice esto: Yo
conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, y estás muerto. Sé vigilante, y afirma las otras cosas que están para morir; porque no he hallado tus obras perfectas delante de Dios...." Apocalipsis 3: 1-2.
En los carnavales se acostumbra usar antifaces para darle colorido a la fiesta y mantener el anonimato. Las máscaras varían de acuerdo a la cultura y al lugar donde se realiza el carnaval; pero todas tienen el fin de ocultar el verdadero rostro de quién las usa. Hay personas que quieren hacer de la iglesia un carnaval, poniéndose una máscara que según ellos va de acuerdo al ámbito cristiano; pero se la quitan al salirse de ahí. Jesús odia la hipocresía, y las personas que le conocieron sabían muy bien esto. Mateo 22:16. Ante Jesús debemos de ser transparentes, no es de cristianos aparentar algo que no somos. Cuando nosotros no falseamos la realidad, y nos mostramos tal cual somos, entonces es más fácil que nos ayuden, que nos entiendan, y nos amen los demás hermanos; pues si aparentamos que estamos bien delante de los demás hermanos, aún cuando nuestra vida no está de acuerdo a las enseñanzas de Dios; entonces ellos pensarán que todo está bien en nuestra vida, y no harán nada para que mejoremos; pero si nos mostramos como somos, con nuestros errores, y con nuestras debilidades, entonces ellos nos enseñaran a vivir la vida cristiana, nos estimularán a practicar buenas obras, nos ayudarán a vencer las tentaciones etc. Todos pasamos por momentos difíciles en donde necesitamos un buen consejo, unas palabras de aliento, una guía para tomar decisiones y enderezar el rumbo; todos podemos caer, pues esta es una lucha espiritual, y por lo tanto sin importar la edad, ni el género, ni si tenemos bastante o poco tiempo de habernos bautizado, todos estamos en peligro latente. Los hermanos de la iglesia de Cristo en Sardis, aparentemente eran hermanos muy activos, y hacían obra; pero era sólo apariencia, el Espíritu Santo les enseña que en realidad están "muertos", por cuanto sus obras no son perfectas delante de Dios. Hoy en día podemos ser como la iglesia en Sardis, aparentar estar bien; pero en realidad estar muertos delante de Dios. Por eso no es de extrañar que hoy en día existan congregaciones que se ven muy fuertes, pero luego se dividen, ya sea por falsa doctrina, enemistades, orgullo, vanagloria etc. El llamado de Dios, es pues, a ser sinceros porque a Dios no le podemos engañar......
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