"Después oí la voz del Señor, que decía: ¿ A quien enviare, y quien ira por nosotros? Entonces respondí yo: HEME AQUÍ, ENVÍAME A MI..." Isaìas 6: 8.
Estamos en medio de una lucha espiritual a muerte; Satanás ganando las almas a través del pecado: las drogas, la maldad, los malos pensamientos, la violencia etc. y Nuestro Dios, salvando las almas mediante el mensaje del evangelio, un mensaje de amor, de bondad, de paz, de conciliación, de justicia, de salvación etc.
En el antiguo testamento se nos menciona el caso de un hombre de Dios, Isaìas, quien tuvo la oportunidad de oír la voz del Señor, quien preguntaba: a quien enviare...?
Esta pregunta fue un reto para el, con un corazón sensible a la palabra de Dios, el respondió inmediatamente: heme aquí, envíame a mi...
Como respondemos nosotros al llamado de Dios para trabajar en su iglesia? talvès con excusas como:
1. No tengo tiempo, tengo muchas ocupaciones que atender...
2. Me falta conocimiento, necesito aprender mas...
3. Otros pueden hacerlo mejor que yo....
4. Ya están los encargados de los diferentes ministerios, ellos lo hacen bien... etc
Debemos saber que Dios salvara a cuantos le permitan salvarlos; y lo hará con nosotros o sin nosotros; sin embargo, si queremos ser triunfadores en la vida, debemos de estar al frente, como Isaìas, esta es la clase de soldados son los que no se confían, los que siempre están despiertos, los que siempre están preparados, los que no son sorprendidos, los que se dejan guiar por su capitán, que es Cristo...
Donde estamos nosotros? en el frente de batalla, o de lejos viendo como otros preparan los sermones y los predican; los que preparan y sirven la cena del Señor; los que dirigen cantos, los que visitan a los enfermos, a los ancianos, a los caídos, a los recién convertidos; los que organizan las actividades de evangelismo; los que toman en serio esta guerra contra satán...
Hay mucho que hacer.....y siempre hay un lugar al frente de la batalla......
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