"Jesús clamó y dijo: el que cree en mí, no cree en mí, sino en el que me envió; yo, la luz, he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas. Al que oye mis palabras, y no las guarda, yo no le juzgo; porque no he venido a juzgar al mundo, sino a salvar al mundo. El que me rechaza, y no percibe mis palabras, tiene quién le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero............" Juan 12: 44-48.
La biblia es el libro más famoso del mundo, el más vendido, el más producido y distribuido. Casi todos los hogares cuentan con una copia, y se reparten en hospitales, hoteles, colegios etc. Sin embargo, es a la vez la norma más desobedecida por el mundo. La gente comúnmente obedece los reglamentos de tránsito, las ordenanzas de la ciudad, el reglamento escolar, el reglamento del ejército, o del trabajo etc. Pero NO OBEDECE la palabra de Jesucristo, el mundo vive como si nada de este mensaje importara, como si esta palabra fuese una sugerencia para la vida, en donde el hombre está en libertad de obedecerla o ignorarla. Pero lo triste del caso, es que ESTA PALABRA NOS JUZGARÁ, en el día final. Nuestra vida será juzgada a la luz de las sagradas escrituras, y no habrá excusas que valgan, no habrá forma de comprar un resultado a nuestro favor, no habrá justificación, ni podremos excusarnos en los demás...... en ese día, dice la biblia que estaremos todos ante el tribunal de Cristo, y serán abiertos esos libros y seremos juzgados por las cosas ahí escritas........ pero si hoy en día sabemos ese contenido, no creen que es de sabios prepararnos obedeciendo antes que llegue ese final día?
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